Investigadores aseguran que el cáncer es tan antiguo como la vida multicelular y probablemente nunca será completamente erradicado
En 2012, 14.1 millones de personas alrededor del mundo fueron diagnosticadas con alguna forma de cáncer, cifra que se espera aumentará a 19.3 millones de personas en 2025. La búsqueda por hallar una cura para el cáncer permanece uno de los objetivos más inminentes de la medicina, pero ¿realmente es posible erradicar el cáncer?
Investigadores de la Universidad de Kiel (CAU) en Alemania, liderados por el Prof. Thomas Bosch, han llegado a una abrumadora conclusión; el cáncer es tan antiguo en la Tierra como la vida multicelular y probablemente nunca será completamente erradicado.
¿Cuándo comenzó la evolución a producir tumores? Esta es una pregunta que los científicos han estado investigando durante años. Se sabe que la causa de los tumores son los llamados genes cancerígenos. En su búsqueda por el origen de estos genes, el equipo realizó que los primeros animales multicelulares ya contaban con la mayoría de los genes que pueden causar cáncer en los seres humanos. Lo que les faltaba hasta ahora era, por una parte, pruebas de que en realidad estas especies sufrían tumores y, por la otra, una comprensión molecular de los mecanismos responsables de la formación de tumores en estos animales.
Bosch y sus colegas investigaron las células y el crecimiento del tejido en diferentes despecies de hydra, un pólipo similar a los corales de edad filogenética. Descubrieron que dos de ellas eran portadoras de tumores, proporcionando evidencia de que efectivamente existía el cáncer en los animales primitivos.
Demostraron también que las células de los tumores de las hydras son invasivas, es decir, que al ser introducidas en un organismo sano pueden desencadenar el crecimiento de tumores. Por lo tanto, aseguran que la característica invasiva de las células cancerígenas es un rasgo milenario.
El estudio, publicado en Nature Communications, demuestra que los animales primitivos ofrecen valiosa información para ayudar a entender enferemdades tan complejas como el cáncer. Así mismo, vuelve poco probable que la “guerra contra el cáncer”, proclamada en 1970, se llegue a ganar. No obstante la esperanza no está perdida, “conocer al enemigo desde sus orígenes es la mejor manera de luchar contra él y ganar muchas batallas”, declaró Bosch.