El contacto visual es una de esas cosas fáciles de arruinar y casi imposible de hacer bien.
El contacto visual es una de esas cosas fáciles de arruinar y casi imposible de hacer bien. Por que todos sabemos que tener demasiado podría parecer que eres una persona extraña. Lo que significa que las conversaciones uno a uno extendidas suelen acompañarse de cálculos mentales silenciosos y frenéticos: ¿Debo apartar la vista ahora? ¿Es demasiado pronto para hacerlo de nuevo?
(Ver: ¿Qué pasa en tu cerebro cuando alguien te mira directo a los ojos?)
En realidad es algo complicado, científicamente toma 3,3 segundos para que el contacto visual pase de amistoso a extraño. Y para hacer las cosas aún más complicadas, un estudio publicado recientemente en la revista Cognition encontró que el contacto visual ?secuestra a tu cerebro?, por lo que es más difícil centrarse en las cosas simples como hablar.
Durante el estudio los autores Shogo Kajimura y Michio Naumra, ambos de la Universidad Japonesa de Kyoto, reclutaron a 26 personas para completar un juego de correspondencia de palabras. Al mismo tiempo, los participantes fueron instruidos para ver una cara realista en una pantalla delante de ellos; dando la apariencia de contacto visual, mientras que en otros estaban mirando hacia un lado.

