Una investigación realizada en la Universidad de Londres arroja una interrogante: ¿su talento es innato o aprendido?
La Universidad de Londres (UCL) realizó una investigación con 11 pilotos de aviones de combate Tornado de la Real Fuerza Aérea (RAF), el estudio consistió en aplicarles dos pruebas estándar cognitivo-visuales para analizar su capacidad de pensamiento.
En esta investigación se determinó que los pilotos de combate presuntamente basan su capacidad para actuar bajo enorme presión en la manera como su cerebro relaciona su participación.
Los pilotos de combate de la RAF son entrenados para que realicen vuelos a velocidades supersónicas a muy baja altitud, por ello requieren de un control fino y un escaso margen de error en su actuar.
Con base en la mencionada investigación los científicos coinciden en que esta disciplina alcanza el límite del rendimiento cognitivo humano, por ello decidieron estudiar las funciones cerebrales de estos pilotos.
Como parte del estudio se compararon con otros de personas de la misma edad y sexo, pero con la diferencia de su oficio profesional; posteriormente los individuos fueron sometidos a escáneres de IRM a fin de analizar su estructura cerebral. Ambas pruebas visuales buscaban medir qué tan rápido y preciso alguien es capaz de responder a un objetivo aun a pesar de la distracción infundida en las pruebas.
Durante la primera de éstas, los pilotos respondían de modo más preciso que el otro grupo; sin embargo, en la segunda no se hallaron diferencias entre los sujetos analizados.
Esto sugiere, dicen los autores, que su rendimiento cerebral está especializado en tareas específicas.
Según el profesor Masud Husain, del Instituto de Neurología y el Instituto de Neurociencia Cognitiva de la UCL, les interesó estudiar a los pilotos porque se les considera un grupo experto en tomar decisiones precisas muy rápidamente.
La pregunta que surge después de conocer las conclusiones de este estudio es si los pilotos de combate nacen con esa característica cerebral. La investigación arroja -según los científicos- que estos individuos necesitan tomar decisiones precisas con mucha celeridad, y tal capacidad para actuar con mayor exactitud en ciertas tareas está asociada a diferencias en las conexiones del hemisferio derecho del cerebro. Hasta ahora los resultados revelaron que un control cognitivo óptimo está acompañado de alteraciones en la estructura cerebral, por ello el doctor Hussain, autor de la investigación, apunta que “una pregunta interesante es si estos pilotos nacieron así, y por ello son buenos en su labor, o han desarrollado tales diferencias gracias al entrenamiento”
El doctor Husain espera ampliar su investigación con la finalidad de hallar una respuesta a tal interrogante, pero en sus próximos análisis incluirá a otros grupos o sectores laborales, como estrellas del deporte y banqueros, para conocer si también muestran diferencias en su estructura cerebral.
¿Qué opinas?, ¿crees que son diferentes sus cerebros o se debe a su entrenamiento? ¿Cualquier persona bajo entrenamiento podría ser piloto de combate?