Contiene un rastreador que detecta la presencia y movimiento de personas detrás de cemento o ladrillos
Es un aditamento militar, se llama Prism 200c, y está pensado para utilizarse en la zona de combate. Los soldados pueden localizar personas que estén ocultas, por ejemplo, en una habitación, y seguir sus movimientos.
Una mochila contiene el aparato a fin de que pueda ser transportado con facilidad y permita llevar a cabo las maniobras de sorpresa. Al colocarlo en la pared, la pantalla muestra puntos rojos que indican la presencia de personas, el número de ellas y cómo se desplazan, aunque no distingue si son aliados o enemigos.
El sistema se basa en frecuencias de banda ultraancha para la detección y tiene la opción de retransmitir los datos a otras computadoras, así el oficial a cargo de la operación puede tomar mejores decisiones en el despliegue de sus efectivos. Lo creó la compañía inglesa Cambridge Consultants y es capaz de ‘ver’ a través de madera, cemento y ladrillos.

