Es una máquina molecular que rota alimentada por energía eléctrica
El motor eléctrico más pequeño del mundo es 60,000 veces menor en tamaño que un cabello humano. Es una molécula que gira alrededor de un eje definido por un átomo de sulfuro, alimentada por corriente eléctrica.
Fue desarrollado por un equipo científico de la Universidad de Tufts, Massachusets, E.U., liderado por el profesor de química Charles Sykes.
Existen nanomotores impulsados por luz o reacciones químicas, pero se trata de millones en un vaso de precipitado; este motor eléctrico, indican sus creadores, es posible observarlo de manera individual y en tiempo real.
Los científicos, cuyo trabajo explican en Nature Nanotechnology, utilizaron un microscopio electrónico de barrido, que en lugar de un haz de luz emplea uno de electrones para observar las moléculas. En una placa de cobre colocaron una molécula que contenía azufre y átomos de hidrógeno y carbono. Su único átomo de sulfuro fungió como el eje central. Con la punta del microscopio (de un diámetro de uno o dos átomos) dirigieron la carga eléctrica al motor a la vez que tomaban imágenes de la molécula mientras giraba.
Los electrones del microscopio se utilizan para conducir el movimiento direccional de la molécula en una configuración de dos terminales. Por otra parte, la temperatura y el flujo de electrones pueden ser ajustados para permitir que la rotación sea controlada a escala molecular en tiempo real.
El motor podrá ser enganchado en fila con otras moléculas para conseguir rotaciones en cadena, y uno de los usos que podría tener es el suministro controlado de medicamentos.

