Residuos de este alimento ya habían sido utilizados en un biocombustible para auto F3
En la Universidad de Warwick, Inglaterra, hace un año presentaron el primer auto de carreras del mundo abastecido por combustible de restos de chocolate, ahora ingenieros de Ford han fabricado un plástico inspirado en tabletas de este producto.
Cuando el plástico está fundido, se le inyecta gas para formar burbujas microscópicas en su interior, formando una especie de panel de abeja sin alterar el volumen, de este modo se consigue menos peso, además es mucho más fácil de moldear y acelera la producción (33% más) de piezas. Esta tecnología, conocida como MuCell, es uno de los adelantos que la marca automovilística aplicará para disminuir el peso de sus coches, al menos 100 kilos en los más pequeños hasta 300 en los grandes, durante las próximas dos décadas.
El vehículo impulsado por desechos de chocolate y aceites vegetales ha sido fabricado según las especificaciones de la Fórmula 3; el volante, la carrocería y los asientos están hechos a partir de fibras vegetales, además tiene un radiador que, según sus creadores, reconvierte el oxígeno en ozono.