El robot corredor puede adaptarse al terreno accidentado sin perder movilidad o equilibrio
Robots como PETMAN o ASIMO han mostrado que es plausible desarrollar algoritmos que permitan a un robot antropomórfico (bípedo) controlar sus piernas para caminar, o correr.
DARPA (Defense Advanced Research Projects Agency), la agencia de investigación avanzada del Departamento de Defensa de Estados Unidos, planea con su proyecto FastRunner el construir un robot bípedo capaz de correr a gran velocidad.
Este proyecto es un trabajo conjunto y de cooperación ente el Instituto Italiano de Tecnología y la Universidad de Tsinghua, China.
Así, este proyecto pretende desarrollar un robot bípedo, con tronco y extremidades, que sea capaz de moverse a 4.3 pasos por segundo. Además, el androide sería capaz de evadir y adaptarse a cambios y obstáculos que se presenten en su trayecto, sin perder el equilibrio.
Tanto el Departamento de Robótica Avanzada del IIT como el Laboratorio de Control de Robots de la UTC realizaron este proyecto mediante un algoritmo que puede adaptar las piernas del robot al terreno, desarrollado por el profesor Mingguo Zhao.
Esta adaptación ayuda a evitar que el robot caiga sobre su propio peso al perder el equilibrio, detectando si en la topografía existe algún desnivel o irregularidad, inclinando sus piernas para oponerse al efecto del terreno, no perdiendo la movilidad.
El robot corredor demuestra que los robots bípedos dejarían de tener un mecanismo lento y torpe para adaptarse a la complejidad de un terreno, de manera fluida y en tiempo real, mediante algoritmos que respondan a estas variantes.