Importantes en el organismo, los ácidos grasos omega 3 y omega 6 son indispensables. Una alimentación variada y rica en pescado asegura un aporte suficiente de estos compuestos. ¿En qué alimentos se encuentran? Veamos qué revelan los últimos estudios.
También lee: DETOX O DESINTOXICACIÓN DE… ¿MITOS?
Equilibrio omega
El omega 3 y el omega 6 son ácidos grasos poliinsaturados y, por tanto, teóricamente saludables. Sin embargo, el bienestar que generan no depende nada más de su volumen en la dieta, sino de la proporción entre ambos tipos (omega 6:omega 3).
Según los expertos, lo saludable es que dicha razón se sitúe entre 1:1 y 4:1, pero las dietas occidentales pueden alcanzar proporciones de 10:1 o incluso más desequilibradas. Tal descompensación aumenta el riego de depresión, ansiedad, obesidad y enfermedades inflamatorias.
Ácidos grasos muros celulares
Los ácidos grasos tienen encomendada la delicada misión de formar las membranas de las células, pero lo hacen de un modo peculiar: en vez de construir una barrera fija e inamovible, van variando su composición a lo largo del día. Es decir, que mientras algunos ácidos abundan por la mañana, otros se concentran en las paredes celulares al llegar la noche, según un reciente estudio austriaco.
Los científicos sospechan que estas fluctuaciones podrían estar detrás de los cambios que experimenta la temperatura corporal o el latido del corazón y podrían explicar por qué los ataques cardíacos son más frecuentes a primeras horas del día.

También: LAS NUECES PODRÍAN PREVENIR LA COLITIS ULCEROSA
Neuroprotección
La demencia senil podría mantenerse a distancia si le hacemos frente con las dosis adecuadas de ácidos grasos poliinsaturados. Cada vez existen más evidencias científicas de que el omega 3 y el omega 6 evitan el deterioro cerebral, en especial en el área frontoparietal, necesaria para resolver problemas y disfrutar de una inteligencia fluida.
Un dato crucial, ya que las neuronas de esa zona son las primeras en dañarse en la tercera edad, como reveló una investigación publicada por la revista Nutritional Neuroscience. A ello se suma que las citadas grasas también ayudan a evitar la pérdida de memoria.
También: DESCUBRE LOS BENEFICIOS DEL AGUACATE
Subida de… salud
El omega 3 del salmón y las nueces tiene efectos similares a la marihuana. No, no es que produzca un pasón: lo que comparte con los porros es su poder antiinflamatorio. Consumir ese ácido graso desencadena una cascada de reacciones químicas que conducen a la producción de cannabinoides naturales, los cuales le ponen las pilas al sistema inmune.
“Con el omega 3 se obtienen los mismos beneficios médicos que la marihuana, pero sin sus consecuencias psicotrópicas”, aclara Aditi Das, de la Universidad de Illinois, en la revista PNAS.

También lee: ¿ES BUENA IDEA MEZCLAR MEDICAMENTOS Y SUPLEMENTOS?
Jet lag graso
Las manecillas del reloj interno se vuelven locas cuando abusamos de las papas fritas, las galletas y las pizzas congeladas, panes industriales y alimentos precocidos.
Médicos de la Universidad de Texas demostraron en fechas recientes que las grasas saturadas que contienen estos productos generan una especie de efecto jet lag que distorsiona el metabolismo y las células del sistema inmune.
Una serie de desdichas
Cuando te falta omega 3, tu cuerpo lo nota, y mucho. Aumentan las enfermedades cardiovasculares y los problemas de hipertensión, te deprimes, te vence la fatiga, se duerme peor, la piel de todo el cuerpo se reseca y descama, la fertilidad mengua y somos mucho más vulnerables a la diabetes y a trastornos inflamatorios como la enfermedad de Crohn.
También: LOS 10 MEJORES Y NO TAN BUENOS ACEITES PARA TU SALUD
Ácidos grasos suman años
Tomar aceite de oliva, nueces y aguacates ayuda a vivir más. Biólogos y genetistas de la Universidad de Stanford han comprobado que sus grasas monoinsaturadas actúan sobre las proteínas relacionadas con el empaquetamiento del ADN en la célula y que los cambios generados pueden aumentar la esperanza de vida de ciertos gusanos hasta 30%.
El descubrimiento podría aplicarse por igual a los humanos: se ha demostrado que los centenarios almacenan más ácidos grasos insaturados.
Texto publicado en Especial: Salud y cuerpo | Revista Muy Interesante México.


