Un estudio reciente demuestra que los conductores que ingieren bebidas cafeinadas tienen una probabilidad 63% menor de sufrir un accidente automovilístico
Un estudio reciente conducido por Mark Stevenson, Lisa Sharwood y otros colaboradores del Instituto George para la Salud Global demuestra que los conductores que ingieren bebidas cafeinadas tienen una probabilidad 63% menor de sufrir un accidente automovilístico.
Los investigadores observaron durante cinco meses (diciembre del 2008 a mayo de 2011) a 1047 conductores de trailers que manejaban durante largos periodos de tiempo entre los estados de Nueva Gales del Sur y Australia Occidental. Los conductores transportaban al menos 12 toneladas de carga a través de una distancia mínima de 200 kilómetros.
Para conformar una muestra equitativa, 530 de los conductores elegidos tenían un historial de accidentes en el último año, mientras los otros 517 no lo tenían. 43% de ellos ingerían café, té y/o bebidas energéticas como método para mantenerse alertas.
Los investigadores se dieron a la tarea monitorear sus hábitos de consumo y medir la cantidad de cafeína ingerida, clasificándolos en tres categorías: consumo bajo (200mg por día), medio (de 200 a 400mg por día) y alto (más de 400mg por día). Además, se cuantificó la cantidad de kilómetros que recorrieron, horarios de trabajo, patrones de sueño y descansos tomados. También fueron considerados factores como el consumo de alcohol, actividad física y uso de drogas ilegales para el estudio.
Tras analizar y sopesar todos los agentes mencionados, el equipo investigador descubrió que los conductores que consumían cafeína tenían una probabilidad 63% menor de chocar que aquellos que no ingerían la substancia; sin embargo, notaron que los efectos de la cafeína tienen una corta duración, así que no debería ser utilizada para sustituir el descanso.
La cafeína es un estimulante que funciona al suprimir la actividad de la adenosina, nucleósido cuya secreción produce el sueño. Es absorbida rápidamente por el tracto gastrointestinal, estando 99% absorbida 45 minutos tras su ingestión. Es por estas cualidades que actúa tan veloz y efectivamente.
El estudio completo fue publicado en el British Journal of Medicine.