Han llamado al experimento “Chrono City” y podría cambiar la forma en que manejamos los trastornos del sueño
Bad Kissingen es una pequeña ciudad balneario en Baviera, Alemania, con una población que no supera los 20,000 habitantes. También es, de acuerdo con el nuevo libro Wild Nights: How Taming Sleep Created Our Restless World, sujeto de un ajuste experimental por parte de la cronobiología, que están buscando remodelar a la comunidad alrededor de los patrones colectivos de los residentes.
El proyecto ? liderado por Thomas Kantermann y ha recibido el nombre futurístico de ?Chrono City? ? está en sus etapas tempranas, pero en el extracto del libro publicado en Popular Science, el autor Benjamin Reiss describe la esencia:
A partir de ahí, Kantermann y sus colegas analizarán los datos recolectados y los usaran para informar cosas como los horarios de inicio y fin de la escuela o cuando los pacientes de ciertos hospitales deberían de recibir ciertos medicamentos.
También planean: alterar las luces de la ciudad para imitar la transición del atardecer al amanecer y entregar relojes despertadores inteligentes que harán que despertar sea más fácil ? al dar un suave impulso a los pobladores para despertarse cuando estén en su fase del sueño más ligera.
¿Suena ambicioso no crees?
Aún así Reiss permanece escéptico del uso final de las metas de Chrono City, argumentando que los científicos están abordando el tema de manera equivocada. Por ejemplo, al intentar reparar el sueño con algunas de las herramientas que lo descompusieron en primer lugar: como despertadores, reglas, pantallas, etc..
Un molesto recordatorio que la forma en que nos enfocamos en intentar mejorar nuestro sueño algunas veces sólo agrava el problema.

