Sí, leíste bien. Aunque no lo creas, algunas grasas te ayudan a crecer sano y fuerte.
¿Sabías que las grasas son necesarias para que nuestro organismo funcione bien? Ayudan a transportar oxígeno a las células, proporcionan energía y protegen los órganos. También regulan la temperatura del cuerpo (esto debido a que la grasa de la piel evita la pérdida de calor interno); ayudan a absorber las vitaminas A, D, E y K; y algunas son buenas para el corazón y el cerebro. En resumen, sin ellas no podríamos vivir. Pero, claro, el chiste es saber elegir las mejores y comerlas con moderación.
Las grasas saludables son las llamadas monoinsaturadas y poliinsaturadas. Las primeras se encuentran en alimentos como el aguacate, el aceite de oliva, los cacahuates, las nueces, los pistaches y las almendras. Mientras que las poliinsaturadas son las grasas Omega 6 y Omega 3, que están presentes en alimentos como el pescado, y el aceite de maíz, de canola y de soya.

