Un péptido en el veneno de las avispas podría ser de gran utilidad para combatir el cáncer de mama
El cáncer causa la muerte de aproximadamente 8 millones de personas cada año. Actualmente, es tratado con radioterapia, quimioterapia y cirugías, las cuales tienen graves efectos secundarios y pueden llegar a ser poco eficientes debido a la resistencia que desarrollan los tumores. Para contrarrestar estas desventajas, investigadores españoles del Instituto de Investigación Biomédica (IRB Barcelona) han diseñado una nueva terapia a base de veneno de avispa.
Un péptido en el veneno de las avispas podría ser de gran utilidad al combatir el cáncer de mama debido a que es capaz de formar poros en la membrana plasmática de las células cancerosas, penetrándolas y finalmente causando su muerte. Sin embargo, esta poderosa sustancia no discrimina entre las células enfermas y las sanas.
El equipo de científicos, liderado por Miguel Moreno, ha ideado la manera de transportar el tóxico al tumor y hacer que se acumule de manera específica y controlada. El sistema consiste de un polímero portador con dos componentes: un péptido que se une a un receptor de la célula cancerosa y el péptido citotóxico del veneno de avispa.
Experimentos in vitro han demostrado que la sustancia se distribuye adecuadamente dentro de las células del tumor sin dañar a los glóbulos rojos y otras células saludables. Dado el éxito de los resultados, los investigadores ahora probarán el sistema en modelos con ratones. Si funciona como esperado, en un futuro podría emplearse como una terapia complementaria a las ya existentes.
El estudio ha sido publicado en Journal of Controlled Release.

