Aunque no lo percibas, hoy la Tierra está en su punto más lejano al Sol y por lo tanto, desciende su velocidad hasta alcanzar el mínimo.
Las ilustraciones del Sistema Solar que aprendemos en la escuela muestran una lógica en apariencia sencilla de cómo funciona nuestro vecindario cósmico: mientras el Sol aparece al centro, la Tierra y los demás planetas giran a su alrededor en órbitas circulares más o menos uniformes.
Y aunque se trata de un esquema útil para entender la disposición general de nuestra estrella, los planetas rocosos más cercanos al Sol y los gigantes gaseosos, lo cierto es que la armonía de la Tierra y los otros mundos del Sistema Solar es mucho más compleja.

Este 5 de julio, la Tierra alcanzará la velocidad mínima a la que recorre su órbita alrededor del Sol. Este fenómeno astronómico ocurre cada año, cuando nuestro planeta se ubica en el afelio, el punto en el que se encuentra más lejos del Sol y responde a la interacción gravitatoria entre ambos astros.
En el afelio, la Tierra se encuentra a 152,100,533 kilómetros de distancia del Sol y desciende su velocidad de 110,700 kilómetros por hora a 103,536 km/h. Este fenómeno ocurre en la primera semana de julio y aunque no resulta perceptible para los observadores terrestres, la lejanía provoca una disminución del 7 % de la luz solar que alcanza nuestro planeta.
Te puede interesar: La animación que muestra la increíble velocidad de la luz en el Sistema Solar
Un viaje elíptico de la Tierra alrededor del Sol
La primera persona en sugerir que las órbitas planetarias en realidad no eran círculos perfectos, sino elipses fue el astrónomo alemán Johannes Kepler en 1609. A partir de cálculos matemáticos y observaciones sistemáticas, Kepler dedujo tres leyes para explicar el movimiento planetario y su velocidad.
Mientras la primera explica que los planetas se desplazan en órbitas elípticas que tienen al Sol en uno de los focos, la segunda de ellas demuestra que las áreas barridas por los planetas en su órbita se recorren por los planetas en tiempos iguales. De modo que cuando la Tierra se encuentra en el perihelio (el punto de su órbita más cercano al Sol) acelera su velocidad; mientras que en el afelio ocurre exactamente lo opuesto.

Perihelio, afelio y las estaciones del año
Una confusión común radica en creer que la distancia de la Tierra respecto al Sol (que tiene su punto máximo en el afelio y mínimo en el perihelio) es la causa de las estaciones del año; sin embargo, éstas se deben al eje de 23.5º de inclinación respecto al plano de su órbita alrededor del Sol.
Ahora lee:

