Muestran una estructura nunca vista y pudieron haber sido puestas al descubierto por un asteroide
En un cráter inexplorado, el rover Opportunity de la NASA, que busca vestigios de vida marciana, se encontró con unas extrañas rocas que presentan una estructura nunca antes vista y que pudieron haber quedado al descubierto por el impacto de un asteroide u otro cuerpo espacial contra la superficie del planeta rojo.
Hace tres semanas el robot llegó al borde del cráter Endeavour (su diámetro es de 22 kilómetros). En el lugar hay un boquete del tamaño de una cancha de tenis abierto por el choque de algún objeto, y ahí la máquina terrestre pudo examinar una roca que ahora los científicos han llamado ‘Tisdale 2’, del tamaño de un taburete. Su superficie es plana y tiene una composición similar a las rocas volcánicas pero con más zinc y bromo.
Opportunity lleva siete años y medio en la superficie marciana (2,703 días marcianos) y la cada vez mayor diversidad de fragmentos hallados hace esperar que aparezcan otros minerales que den más información sobre la composición y orígenes de Marte. La próxima misión de Opportunity, en las mismas formaciones rocosas de los bordes del cráter, será buscar rocas arcillosas, que podrían guardar señales de vida, si es que alguna vez existió en ese planeta. Vía: NASA