La extraña Galaxia del Molinete pone en duda las teorías más aceptadas sobre el crecimiento galáctico
A 25 millones de años luz de la Tierra, sobre la constelación Osa Mayor, yace la Galaxia del Molinete (también llamada Messier 101), aguardando un intrigante misterio. A diferencia de otras galaxias espirales, como la Vía Láctea, carece de estrellas en su halo galáctico, poniendo en duda las teorías más aceptadas sobre el crecimiento de las galaxias.
Se cree que las galaxias espirales que conocemos hoy en día alcanzaron su tamaño integrando a enanas marrones. Un proceso que deja atrás un halo de gas interestelar, estrellas viejas y materia obscura rodeando a la galaxia. Hasta ahora, se creía que estos halos eran una norma, existiendo a lo largo del universo.
El astrónomo Pieter Van Dokkum, de la Universidad de Yale, y sus colegas estudiaron con precisión a la Galaxia del Molinete y encontraron que su halo externo está extrañamente vacío de estrellas, demostrando que adquirió su enorme tamaño sin devorar estrellas marrones.
Actualmente, los astrónomos buscan saber qué tan común es este fenómeno. Si se encuentran otros halos galácticos carentes de estrellas, sabrán con certeza que la Galaxia del Molinete no es una excepción a la regla, sino que hay un error fundamental en las teorías actuales sobre el desarrollo galáctico.