Investigadores hallaron en Tanzania impresiones fósiles de dos grupos de viajeros
Hace unos 120,000 años, a orillas de lo que hoy es el lago Natron, en Ngare Sero, norte de Tanzania, 18 de los primeros Homo sapiens caminaban juntos a través de ceniza volcánica hacia un punto desconocido, en dirección al oeste. Otros 16 que se dirigían al este, según sus huellas fósiles, no viajaban juntos y algunos caminaron, otros corrieron y unos más se desplazaron a un paso intermedio.
Brian Richmond, de la Universidad George Washington, dio a conocer el hallazgo de estas huellas fósiles (más de 350 en total, el año pasado), durante el encuentro anual de la Sociedad de Paleoantropología. De acuerdo con un artículo en Scientific American, él y sus colegas las compararon con impresiones de hombres y mujeres actuales, de Ileret, Kenia, moviéndose a diferentes velocidades. A partir de las mediciones de las pisadas concluyeron que estos grupos de antiguos viajeros humanos estaban compuestos por niños, hombres y mayoría de mujeres. No había huellas de animales entre ellos.
En los registros fósiles humanos las huellas son extremadamente raras, pero muy valoradas porque ofrecen información única acerca de la anatomía y el comportamiento de nuestros parientes antiguos. “El registro fósil dan una visión del comportamiento real”, dice Richmond.