En algunas pinturas bizantinas, Jesús parece tener los ojos delineados. Sin embargo, fue la manera de enfatizar un mensaje imperial.
Si algo distingue a los templos bizantinos, es la ornamentación cargada en oro. La intención de los arquitectos del Imperio Romano de Oriente era generar una sensación de lo divino a partir de la luz que irradiaban los colores de los metales preciosos. Sin embargo, llama la atención que a Jesús se le representó en las pinturas bizantinas con los ojos delineados. Esta es la razón.
¿Qué representa el Pantocrator en las pinturas bizantinas?

El arte bizantino se desarrolló en gran medida a lo largo de la Edad Media en Europa. A pesar de tener una fuerte influencia árabe, conserva esta necesidad medieval de entender a Dios como centro de la vida y el Universo. Por esta razón, casi la totalidad de las pinturas de este estilo son de carácter sacro.
El Pantocrator es quizá el ícono más representativo de este movimiento. Se refiere a las representaciones de Jesús con una expresión severa, pensado para decorar los espacios sagrados de Bizancio, la antigua capital del Imperio Romano de Oriente. Por esta razón, se concebía para dimensiones murales monumentales, construidas a base de mosaicos venecianos bañados en oro o lapislázuli.
Se le puede identificar por la aureola alrededor de la cabeza, que indica la santidad de Cristo. Generalmente tiene los dedos de la mano derecha señalando una bendición, y en la izquierda, sostiene las sagradas escrituras de la tradición judeocristiana.
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¿Por qué tenían líneas expresivas tan marcadas?

El estilo bizantino floreció en la colindancia del mundo occidental con el árabe. Las influencias de ambas maneras de representar a las figuras religiosas se decantaron en la manera en la que se podía mostrar expresividad en Jesús y María, los dos personajes bíblicos que motivaron a los bizantinos.
Ambas figuras sacras representaban paralelamente el poderío de los emperadores y gobernantes. Era una manera de demostrar el poder económico y político que podían ejercer por medio de la fe. Por esta razón, se resaltaron las facciones faciales para que parecieran más severas.
Uno de los gestos más cargados, sin duda, fueron los ojos. Es por esto que podría parecer —en el caso de los Pantocrator— que tienen los párpados delineados, como si fuera maquillaje. Tenía que mostrarse el mensaje de solemnidad, fuerza y presencia imperial. En los tiempos que el cristianismo comenzaba a expandirse por Europa, no hubo mejor medio que la imagen de Jesucristo para hacerlo notar.
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