El esqueleto del tiranosaurio bataar llamado Lenny, regresará a su natal Mongolia tras haber sido raptado
El esqueleto del tiranosaurio bataar llamado Lenny, regresará a su natal Mongolia tras haber sido raptado. Paleontólogos americanos alertaron a las autoridades al ver que el fósil robado sería vendido en una casa de subasta neoyorkina por más de 1 millón de dólares. De regreso a Asia, a Lenny le espera una importante plaza en el nuevo Museo Nacional de Dinosaurios en Mongolia.
Tyrannosaurus bataar, pariente cercano de T-Rex, vivió a finales del periodo Cretácico, hace aproximadamente 70 millones de años, en lo que hoy es Asia. Fue de las últimos especies en habitar la Tierra antes de la extinción de los dinosaurios. Esqueletos fueron encontrados en el desierto de Gobi por primera vez en 1946.
Se cree que Lenny fue ilegalmente obtenido y contrabandeado fuera de Mongolia entre el 2005 y el 2012. El esqueleto casi completo de 7 metros y medio de largo y cerca de 3 de alto, fue desmontado y enviado al paleontólogo americano Eric Prokopi en Florida. Prokopoli, quien espera su sentencia tras haberse declarado culpable de fraude y conspiración, ensambló de nuevo al esqueleto con el fin de venderlo.
El esqueleto fue rastreado por agentes de migración estadounidenses en colaboración con la policía de Manhattan. Se encontró que Lenny es tan sólo un pieza de la colección de fósiles saqueados que incluía otro esqueleto de tiranosaurio bataar. Todos los restos serán regresados a Mongolia. El caso de Lenny ha puesto en evidencia el lucrativo mundo del saqueo paleontológico.