Cuatro tipos de poderosos hongos, descubiertos en Brasil, logran zombificar a las hormigas y luego, como película de terror, éstas mueren.
En Zona da Mata, ubicada en el estado brasileño de Minas Gerais, fueron descubiertas cuatro especies de hongos del género Ophiocordyceps que infectan a las hormigas y luego se apoderan de su cerebro. Transportándose en la cabeza de estos insectos, los obligan a esparcir sus esporas para que los hongos se reproduzcan en los lugares que éstos consideran idóneos. Cuando esto sucede, las hormigas no sólo llegaron al lugar a donde han sido enviadas, sino también a su muerte inminente.
La investigación fue desarrollada por científicos de la Universidad de Pensilvania, junto con la Universidad Federal de Viscosa, en Brasil, y publicada en la revista Plos One.
Los hongos fueron descubiertos por Harry Evans y David Hughes y, de acuerdo con ellos, cada una de estas cuatro variedades está altamente especializada en una especie de hormiga y posee un conjunto de adaptaciones y tipos de esporas para asegurar la infección.
Los investigadores advirtieron que cada especie de hongo zombie se especializa en un tipo diferente de hormiga.

Cuando una hormiga carpintera de la selva tropical brasileña es atacada no hay nada que hacer. En el momento que el insecto se infecta con un hongo determinado, se convierte en una “hormiga zombi” y ya no controla sus acciones. A partir de aquí, el hongo continúa creciendo y pudriéndose dentro del cuerpo de la hormiga, atravesando en algún momento la cabeza de la hormiga y liberando sus esporas de hongos. Todo este proceso, de principio a fin, puede llevar más de diez agonizantes días.
Cuando el hongo infecta a una hormiga carpintera, crece a través del cuerpo del insecto, drenándolo de nutrientes y secuestrando su mente.
También pueden comenzar a invadir los músculos de la hormiga, ya sea penetrando las células musculares en sí mismas o creciendo en los espacios entre ellas. El resultado es lo que puede ver en este video : una fibra muscular roja, rodeada y drenada por una red de células fúngicas amarillas interconectadas. Esto es algo exclusivo de Ophiocordyceps .