El enorme tamaño de algunos herbívoros de la prehistoria resultó benéfico para ellos y para la Tierra.
Si te sorprenden los hallazgos de restos fósiles de animales prehistóricos enormes, un nuevo estudio del Centro de Investigación Ecológica y Aplicaciones Forestales (Creaf-CSIC-UAB) ?que se publicó en la revista Nature? tiene la respuesta: el tamaño de los mamuts, caballos, rinocerontes y otros herbívoros de los años 110 mil a 10 mil a.C. se debe a un sentido de supervivencia del clima frío.
¿Cuáles fueron los beneficios de su tamaño?
La gran magnitud de esos animales fue clave para sobrevivir a las condiciones ambientales de este tiempo, pues así lograban digerir grandes cantidades de comida, gastando un mínimo energía.
Según la investigación, el ritmo metabólico de los animales bajaba conforme eran más grandes, así aprovechaban más la energía.
Además, lograban deshacer la nieve en cada pisada que daban, lo que provocaba que labraran y ?que en cierto modo? hubiera una fertilización en la tierra mucho más rápido.
Durante la última glaciación, los animales que habitaban las tundras y estepas de Europa tenían un tamaño que no se ha repetido. Por ejemplo, los rinocerontes y el mamut alcanzaban las diez toneladas y medían hasta cinco metros de altura. Hoy un elefante africano llega a las 6 toneladas y poco más de tres metros.
Los expertos llegaron a esa conclusión gracias a un modelo matemático que utilizan para medir el reverdecimiento de la Tierra.