Papas genéticamente modificadas pueden sobrevivir incluso al mildiu que desató la Gran hambruna irlandesa
Una de las más grandes amenazas para el cultivo de papas es el mildiu, una plaga que suele atacar cuando el tiempo es más favorable para su crecimiento y es capaz de provocar grandes pérdidas. En los años 1845 a 1849 desató la Gran hambruna, que acabó con miles de vidas en Irlanda, y cada año en Gran Bretaña se pierden hasta 6 millones de toneladas de la cosecha a causa de ella.
Después de tres años de investigación y pruebas, científicos británicos obtuvieron papas genéticamente modificadas que pueden sobrevivir incluso a la exposición del mildiu tardío. Para lograrlo añadieron un gen que estimula las defensas naturales de los vegetales para luchar contra el mildiu. Los resultados de su estudio han sido publicado en la revista Philosophical Transaction of the Royal Society B.
El Prof. Jonathan Jones del Sainsbury Laboratory , líder de la investigación, considera mejor controlar la enfermedad a través de la genética que con productor químicos (los cuales se han vinculado con el desarrollo de Alzheimer), sin embargo, distintos grupos europeos como GeneWatch se oponen a la biotecnología y prefieren utilizar pesticidas, pues aseguran que la mayoría de los ciudadanos no consumirían productos genéticamente modificados.
Las políticas en la Unión Europea son muy restrictivas y ya fue negado una vez el permiso para cultivar papas genéticamente modificadas. Los investigadores no esperan que en esta ocasión sea diferente. Por el momento, se está buscando la aprobación de Estados Unidos para comercializar el producto ahí, a través de la compañía Simplot. Una situación similar se desarrolla en torno a los jitomates morados recientemente desarrollados.

