El Heterorhabditis bacteriophora es un nemátodo y ha sido observado por investigadores a lo largo de 12 años; su peculiar táctica y comportamiento con sus víctimas son fascinantes.
El Heterorhabditis bacteriophora, es un nemátodo; es decir, un gusano de cuerpo alargado y cilíndrico, el cual es un consumado usurpador de cuerpos pues ataca a las larvas enterradas en el suelo, y una vez dentro de ellas, su ataque resulta aterrador: licua sus órganos y se alimenta del caldo resultante, luego su víctima paulatinamente empieza a cambiar de coloración hacia el rojo.
Tal modo de atacar sirve a los agricultores porque ayudados de estos gusanos limpian sus cultivos de plagas, como las larvas de escarabajos; sin embargo, los científicos no comprendían por qué las víctimas del gusano cambiaban coloración, de ahí que Andy Fenton y un grupo de investigadores de la Universidad de Liverpool se hayan dedicado durante 12 años al estudio de este parásito y comprobaron que esta táctica es empleada para engañar a sus posibles depredadores, o bien, debido a su coloración, mandarles una señal de peligro.
Con el apoyo de investigadores de la Universidad de Glasgow, Fenton y su equipo desarrollaron un experimento para conocer la mutación de color: a un petirrojo silvestre le colocaron dos tipos de larvas de la polilla, una infectada por el nemátodo y otra no infectada, el petirrojo prefería ésta última. “Por eso resulta lógico que un drástico cambio de color se constituya en una señal de advertencia para sus depredadores. Y es sabido que el rojo es un color utilizado para hacer una advertencia”, comentó Fenton.
Posteriormente los estudiosos realizaron varios experimentos, pues observaban que mientras el gusano comenzaba a tornarse más rojo, las aves se alejaban más de ellos, Fenton comenta: “Nos sorprendió que los resultados sean tan evidentes, sobre todo cuando comparamos insectos infectados con los que estaban muertos desde hace tiempo. Pensamos que los pájaros no se interesarían por las orugas muertas, pero preferían esas y no las infectadas”.