La polución hace que se deposite más nitrógeno en el suelo, por lo que en estos lugares las carnívoras lo obtienen de sus raíces
Las plantas carnívoras que habitan en zonas más contaminadas consumen menos insectos que las que viven en ambientes limpios, según revela un estudio que se publicó en la revista New Phytologist.
Aunque se podría pensar que los insectos de lugares contaminados son menos apetitosos, la razón por la que especimenes como la Drosera rotundifolia, analizados en este trabajo, dejó de comer animales es otra:
Las plantas carnívoras suelen vivir en ambientes con poco nitrógeno, y por eso extraen este elemento de los insectos.
La polución hace que se deposite más nitrógeno en el suelo, por lo que en estos lugares las carnívoras lo obtienen principalmente por la vía “convencional”, es decir, por las raíces.
Los investigadores, de varias universidades del Reino Unido y Suecia, observaron que las plantas de ambientes contaminados obtenían alrededor del 20 por ciento del nitrógeno de los insectos, mientras que las que viven en zonas más limpias y con menor cantidad de nitrógeno en el suelo, obtenían de las presas más del 50 por ciento del mismo.

