Este vehículo eléctrico está diseñado para grandes velocidades, un híbrido entre tren y auto
Mide 15 metros de largo, tiene ocho puertas por lado, un cupo de 23 pasajertos y alcanza una velocidad máxima de 250 km/h. Es quizá un vistazo al transporte de pasajeros del futuro entre las ciudades. Sus creadores, el ex astronauta holandés Wubbo Ockels y la especialista en aerodinámica de la Fórmula Uno Antonia Terzi, pretenden ofrecer la velocidad y comodidad de un tren con la flexibilidad y conveniencia de un auto.
Este vehículo eléctrico podría tener carriles urbanos o autopistas exclusivas para largas distancias, pero también puede circular por las calles a velocidades normales. Le fueron incorporados cilindros hidráulicos para que pueda situarse a tan sólo siete centímetros del piso cuando se desplaza a altas velocidades, y subir hasta 43 centímetros si es conducido en ciudad. También, la dirección trasera ayuda a que el Superbus pueda girar en un círculo de 24 metros, lo que facilita la maniobra en una glorieta.
Podría estar en las calles en unos cinco años, pues ya hay interesados en Las Vegas, Dubai, Abu Dabi y Países Bajos.