Las personas que padecen fobias experimentan un temor exacerbado e irracional ante un determinado estímulo. Para los afectados, exponerse al mismo no es precisamente agradable: tal cosa les puede causar mareos, temblores, sensaciones de pérdida de control e incluso alteraciones del ritmo cardiaco, por lo que tratan de evitarla como sea.
Los expertos estiman que entre el 6% y 9% de la población mundial padece alguno de estos trastornos que, eso sí, es posible tratar. Entre los más comunes se encuentran:
Acrofobia: miedo exagerado a las alturas.
Aracnofobia: Miedo a las arañas.
Claustrofobia: a los espacios cerrados.
Glosofobia: miedo a hablar en público.
No obstante, se han descrito muchas otras fobias, algunas de ellas llamativas, como las siguientes…
Imagen: Pixaby