Las experiencias nutricionales de los padres en el útero tienen un impacto en las nuevas generaciones…
Un estudio publicado en The FASEB Journal, mostró que el propio ambiente prenatal de los padres tiene un impacto detectable en el peso de sus hijos. Las madres que estaban desnutridas en el útero tienden a producir bebés más pequeños, mientras que la malnutrición de un padre en el útero da como resultado que su descendencia sea más pequeña cuando tienen 2 años de edad. Los resultados provienen de un experimento que descartó confundir los factores socioeconómicos que podrían influir en el crecimiento de los bebés a través de las generaciones.
"Las intervenciones nutricionales tales como los programas de suplementación dietética en las poblaciones pobres están frecuentemente socavadas por una aparente ausencia de impacto inmediato", explicó Andrew M. Prentice, de la Unidad MRC de Gambia y MRC International Nutrition Group en Londres Escuela de Higiene y Medicina Tropical en Londres.
Este estudio demuestra que puede tomar varias generaciones para eliminar el fracaso del crecimiento y el retraso del crecimiento debido a estas influencias intergeneracionales.

