Hace cientos de miles de años, el rascón de Cuvier (Dryolimnas cuvieri) voló desde su hogar nativo en Madagascar hasta el atolón de Aldabra, un arrecife entre las islas Seychelles, también en África. El arrecife, libre de depredadores, era un lugar cómodo para los rascones que —al verse sin necesidad— perdieron la capacidad de volar.
Pero una catástrofe ocurrió hace aproximadamente 136 mil años, cuando una gran inundación barrió el atolón de Aldabra y a las aves que no vuelan, bajo las aguas del Océano Índico, lo que llevó a su extinción.
Sin embargo, no todo se perdió. Aproximadamente 36 mil años después, en la edad de hielo, los niveles del mar disminuyeron y el atolón reapareció en la superficie del agua.

Después de un tiempo, sucedió algo similar: los rascones volvieron a despegar de Madagascar y volaron hacia el atolón. Los años pasaron y, las aves, una vez más, evolucionaron para dejar de volar.
Esto significa que una sola especie, el Dryolimnas cuvieri, evolucionó para no volar dos veces, un fenómeno conocido como “evolución iterativa”.
Regresar de la extinción
Investigadores de la Universidad de Portsmouth llegaron a esta conclusión al comparar los huesos del antiguo rascón de Cuvier con aves más recientes. Eso incluyó los huesos más modernos de los rascones voladores y los no voladores (Dryolimnas cuvieri aldabranus) que aún viven en el atolón de Aldabra.
En el estudio se descubrió que los huesos de los rascones de Aldabra eran muy similares a los huesos de rascones modernos.
Además, los investigadores descubrieron que los huesos del ala y el tobillo que se remontan a hace aproximadamente 100 mil años, o en la época en que las aves volvieron a volar al atolón, mostraron evidencia de que estaban evolucionando para perder su capacidad de vuelo.

El hueso del tobillo era más fuerte en comparación con el mismo hueso del tobillo en las aves voladoras. Esto sugiere que las aves se estaban volviendo más pesadas y perdían la capacidad de volar.
En cuanto a por qué estas aves dejaron Madagascar en primer lugar, aún no está claro. Pero cada 50 o 100 años aproximadamente, factores como la superpoblación o la disminución del suministro de alimentos provocan la migración masiva de aves desde Madagascar en todas direcciones a través del Océano Índico.