La pasión de los toritetsu es sacar fotografías, lo más perfectas posible, de los trenes que ven pasar por las estaciones o vías de tren.
Son capaces de aguardar durante horas en una estación para ver pasar un tren y tomarle la fotografía que falta en su colección. Esta extraña afición es usual en Japón desde hace muchos años y los que forman parte de esta comunidad son conocidos como toritetsu.
Los trenes japoneses son admirados desde hace mucho tiempo por su tecnología avanzada y su puntualidad. Los toritetsu saben esto, pero su afición va más allá: como si se tratara de observadores de aves, les gusta “cazar” los especímenes más raros. Varios de ellos recitan de memoria los horarios de los trenes, graban sus ruidos, o coleccionan trenes en miniatura.
Según Nobuaki Takada, consultor de NRI Social Information System Services, en 2015 Japón contaba con unos cinco millones de aficionados a los trenes. Entre estos grupos, los más famosos son los toritetsu (los que toman las fotos “perfectas” de los trenes).
En busca de la foto perfecta: la misión de un buen toritetsu

La pasión de los toritetsu es sacar fotografías, lo más perfectas posible, de los trenes que ven pasar por las estaciones. Grupos de hasta 20 o más personas se reúnen cámara en mano para registrar esa imagen para su colección. Se introducen en sitios prohibidos o peligrosos con tal de obtener la mejor imagen.
Los toritetsu profesionales cargan grandes cámaras de última generación, mientras que otros se conforman con cámaras de teléfono. Al final no importa el dispositivo, sino estar en el momento adecuado para presenciar el paso del anhelado tren.
Ryunosuke Takagai, un estudiante de 19 años, a veces se levanta a las 5 de la mañana para sacar fotos y trabaja ocasionalmente a tiempo parcial en fábricas para financiar su pasión. Dice amar “todo” sobre los trenes.
“Es realmente gratificante capturar (en una foto) el tren que has estado esperando durante horas”, explica.
Esta comunidad gusta de visitar miradores alejados a los que sólo se puede acceder en coche. Pueden pasar horas en un lugar sólo para tomar la foto perfecta. Algunos toritetsu hacen fotos sencillamente espectaculares.
La comunidad toritetsu supera los 5 millones de “miembros” en Japón. Hacen viajes en solitario o en grupo para situarse el punto ideal y fotografiar un tren que pasa por un puente sobre el río. Planifican a detalle el ángulo, la hora y el momento para que el registro sea perfecto.
Cuando la pasión se convierte en violencia

Esta afición pudiera parecer totalmente pacífica, pero si alguien se atreve a cruzarse por el camino de un toritetsu, su reacción puede llegar a ser violenta. No en todos los casos, por supuesto. Sin embargo, hechos recientes como el acoso de un ciclista y el ataque a un adolescente en 2021 preocupan a los aficionados.
Al estar en busca de la foto perfecta, los toritetsu se frustran cuando algo o alguien la arruina. Según el periodista especializado Jun Umehara, que trabajó para una de las revistas ferroviarias más famosas de Japón, este comportamiento tiene diversas explicaciones:
“La idea de no tener esta última pieza es casi intolerable. De ahí su comportamiento a veces “desesperado”, dice.

Por otro lado, los toritetsu sienten especial devoción por las locomotoras viejas, cuyos ejemplares cada vez escasean más y son objeto de interés de estos fotógrafos.
“Cada tren es único y, para ellos, es la última pieza del rompecabezas para su colección de fotos”, comenta Umehara.
Lo anterior ha llevado a que las compañías ferroviarias aumenten la seguridad de sus instalaciones ante los aficionados que se aventuran en espacios prohibidos. Pero hay otro sector que ve con buenos ojos a los toritetsu, tal es el caso de la compañía JR East, que lanzó el año pasado un club para los apasionados de los trenes.
“Podemos contar con los ‘toritetsu’ para tomar fotos hermosas de nuestros trenes y promocionarlos en internet”, reconoce Yusuke Yamamoto, responsable del proyecto.
Otros entusiastas de los trenes

En Japón no solo existen los toritetsu entre los amantes de los trenes y su universo relacionado. También podemos contar a los nori-tetsu, quienes aman hacer viajes en trenes, o los Jikokuhy que se entretiene examinando los horarios de llegada y salida de los trenes.
Ora especie curiosa es la de los Eki-tetsu, que se distinguen por ser expertos conocedores de las estaciones de trenes y cómo moverse entre ellas. Un caso muy curioso es el de los Oto-tetsu, que son capaces de decir el tipo de tren que se aproxima tan solo escuchando su sonido.
Por último, los llamados Mokei-tetsu son grupos de fanáticos que se dedican a armar trenes a escala y coleccionarlos.
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